Este jueves se realizaron las II Jornadas Académicas de Extensión de la Facultad de Información y Comunicación (FIC) bajo el título “Expandir las aulas: trayectorias y diálogos sobre extensión”, un encuentro organizado por la Unidad de Desarrollo de la Extensión y Actividades en el Medio (UDEA).

II Jornadas Académicas de Extensión de la FIC

La apertura en el aula magna de la FIC estuvo a cargo del pro rector de Extensión y Actividades en el Medio, Mario Barité; de la decana de la FIC, Gladys Ceretta; y de la coordinadora de la UDEA, Siboney Moreira.

La responsable de la organización comenzó destacando los 10 años de la creación de las unidades de Extensión de la Universidad y los 100 de la Reforma Universitaria de Córdoba, el paraguas de estas jornadas, y enfatizando cómo se trabaja de forma conjunta dentro de la facultad y en la UdelaR por generalizar la Extensión. Ceretta reconoció especialmente la labor de la UDEA y el apoyo de la CSEAM, haciendo énfasis en cómo ahora han integrado los anteriores servicios (EUBCA y Liccom) para generar este nuevo “espacio institucional de conjunción real donde trabajamos las distintas disciplinas con una visión integral”, un hecho que se reflejó en el programa de las jornadas. En la bienvenida instó a los participantes a aprovechar esta iniciativa para discutir y acordar alrededor de la Extensión. Por su parte Barité se refirió a la intención de su Comisión Sectorial por contribuir a “rediscutir los conceptos de Extensión y poner las diferencias sobre la mesa”. Destacó el papel de los estudiantes que han sido “el motor histórico de la extensión” desde Córdoba hasta la actualidad, algo de lo que “nadie duda”.

La primera mesa temática trató sobre las tensiones y las oportunidades en la curricularización de la extensión y estuvo integrada por la directora del Instituto de Información (II), Paulina Szafran; el profesor agregado de la Sección Académica Medios y Lenguajes Audiovisuales (SAMLA), Federico Beltramelli; y la encargada de la Unidad de Apoyo a la Enseñanza (UAE), Varenka Parentelli.

En primer término Beltramelli propuso analizar el proceso de curricularización de la extensión en paralelo a otros cambios y estableció en la resolución del CDC de 2009 sobre las líneas de trabajo para la curricularización, el punto de inflexión en este tema. Casi diez años después, ahora “es el momento de ver qué pasó con el reconocimiento de las actividades curriculares dentro de los planes de estudio, cómo la Universidad evalúa la carrera docente a partir de esta resolución, y cómo esas señales que estamos dando en términos de evaluación de la carrera docente y de las carreras estudiantiles pesan en la planificación del trabajo institucional y docente” enumeró el profesor como forma de evaluar el recorrido realizado. “¿Paga lo mismo un esfuerzo en extensión, que en ensenanza, que en investigación? ¿Vamos a seguir diseccionando la actividad universitaria? ¿Todos vamos a tener que seguir haciendo todo? ¿Podemos hacer eso? Yo creo que es necesario apuntar hacia la especialización en las funciones universitarias. Propongo estas líneas de evaluación, pero puede haber otras” dijo Beltramelli con la intención de provocar el debate respecto a la exigencia de trabajar en las tres funciones universitarias.

En relación a los desafíos, tensiones y oportunidades de la curricularización de la extensión, el docente observa que es necesario interrogarse si alcanza con una resolución del CDC para definir una política de extensión y convocó a reflexionar acerca de cómo se define la agenda hoy, a quién pertenece y cómo la pensamos. “No colonizar el concepto de extensión porque eso puede ser un problema grave, porque imposibilita que sea actualizado o revisado” advirtió. Como alternativa convocó a pensar la curricularización de la extensión como una oportunidad metodológica: “Deroguemos la práctica de la extensión como singular. La debemos asumir como una estrategia de abordaje de un curso, porque es la única forma en que un estudiante se puede acercar a ‘la intimidad social’ en palabras de Pablo Carlevaro”.

Posteriormente Szafran recordó que la curricularización de la extensión es un proceso que “no ha estado exento de oportunidades y tensiones, y va unida a la integralidad: no la podemos pensar de otra forma”. Celebró que la información y la comunicación son campos que facilitan “pensar la extensión” y que ante la fusión de los anteriores servicios universitarios en la FIC “nos encontramos con que los estudiantes ya estaban trabajando en estas áreas". La directora del II destacó el rol de los Espacios de Formación Integral (EFI) y de los proyectos de extensión estudiantiles para ayudar a la curricularización. “Hay que promover los proyectos porque son mejores que las intervenciones puntuales, porque trabajan directamente la integralidad” sostuvo Szafran.

Por último Parentelli defendió la curricularización de la extensión porque “obliga al estudiante a transitar por la extensión y a los docentes a proponer espacios para realizarla”. En este campo de trabajo el desafío pasa a ser “cómo evaluamos los docentes a los estudiantes en sus prácticas de extensión” ya que ante este tema surge “un aula magnificada donde se incluyen otros saberes que no son académicos” y porque “el aprendizaje es en el campo de la acción” agregó la responsable de la UAE.

Las II Jornadas Académicas de Extensión de la FIC abarcaron todo el día con diversas mesas temáticas y conversatorios que reunieron a docentes y estudiantes de la Facultad alrededor de sus experiencias de extensión.